Podría ceñirme a lo físico, a la explicación racional,
y explicar que estas increíbles imágenes son producto
de un fenómeno atmosférico óptico.
Producido por la reflexión de la luz,
en los cristales de hielo que se disponen en las nubes,
en una capa dispuesta en horizontal.
Podría, pero son tan abrumadoramente bellas y extraordinarias,
que sin embargo prefiero quedarme con esa otra realidad.
La que nace en del alma,
en el instante de coger las fotografías,
donde me susurraba que estaba retratando,
un reino escondido de lo cielos.
Un palacio de Nácar flotando entre las nubes.
Algo fantástico, delicado y etéreo,
como los colores imposibles
con los que pintar el firmamento.
Y con la llegada de la noche y la Oscuridad,
me regocije observando como se alejaba,
escondiéndose de nuevo en el inmenso azul.
¡Con la sonrisa de haber contemplado algo casi prohibido!
Con la consciencia de que seguro,
en un incierto momento,
bajo un futuro y desconocido cielo,
en algún lugar insospechado,
volvería a ver la fortaleza flotante,
de joyas de luz de Nácar,
sobrevolar lo cielos.
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7 Febrero – Gergal (Almería) Spain – Nikon D7000
A STORMCHASER ….
Fotógrafo . POESIA
Buscando, pasa un fotógrafo…
Cazador de momentáneos instantes,
de reflejos fugitivos del tiempo,
que intentan vencer al olvido.
Cazador ha tomado imágenes.
Buscándolas estuvo, hasta haber encontrado.
Y ahora… ¿Quién sabe…? Cuantos podrán verles.
El tiempo, en ellas se ha detenido.
Distancias acortadas en el mirar.
¿Cuántas imágenes del mundo
ya han podido ser preservadas?
Pedacitos de historia, artísticas formas,
estilos diversos, detalles, van formando,
encuentro visual de distancias y pasado.
Autor: Javier R. Cinacchi
Precioso Inma, muchas gracias.